10 de enero de 2012

Aquel maestro


Aquel maestro, apareció desganado un día cualquiera,
su portafolio era marrón, del color de las nueces.
Aquel maestro, acomodó sus hojas y carpetas,
respiró tranquilo y dijo: ¿comenzamos?

Aquel maestro, no era apreciado por sus pares,
tampoco por muchos de sus alumnos.
Aquel maestro hablaba fuerte,
y escuchaba pasible casi en silencio.

Aquel maestro, era un maestro de emociones,
enseñaba con pasión y euforia.
Aquel maestro, era terminante en sus decisiones,
y comprensible con las demandas.

Aquel maestro, un día trajo cajas de libros,
elegimos cuentos, novelas y ensayos.
Aquel maestro, hizo del aula una sala de lecturas,
hizo del aula una sala de experiencias.

Aquel maestro, hizo que la escuela tuviera sentido,
hizo que permaneciésemos atentos.
Aquel maestro,  un día abrió la ventana y pidió un cigarrillo,
fumó en el aula.

Aquel maestro,  tomó exámenes y calificó,
en contra de su voluntad.
Aquel maestro, no esperaba nada de nosotros,
tal vez ni siquiera de él mismo.

Aquel maestro, ocultó su enfermedad,
aunque en su voz algo sonaba disonante.
Aquel maestro, tenía un auto modesto,
un Ford escort bordó.

Aquel maestro, bebía whisky en soledad
fumaba en su sótano-biblioteca.
Aquel maestro, citaba a Nietzsche,
para hablar de mujeres.

Aquel maestro, fue docente a los cincuenta y tantos,
pero fue maestro desde siempre.
Aquel maestro, dedicó su vida a enseñar,
fue más que un ocupante esporádico de una silla y un escritorio.

Aquel maestro, un día se alejó silencioso
casi como esperando volver.
Aquel maestro, sí que es y será un maestro
un militante de la educación, un abrazo de letras y experiencias.

Este pretende ser un sencillo homenaje. 
(dedicado a Roberto Gaztelú)
Maestro de la vida   

7 de enero de 2012

Carta para una idea



Querida Idea:

Hoy me encontré con cierta urgencia de hacerle notar lo complejo que a veces resulta saber de usted.
Sus cualidades admiradas por mi persona, a veces dificultan la posibilidad de hacerme con algunas palabras. Más todavía, las propiedades a las que luego me refiero comienzan a desvanecer mi tan preciada pero desteñida integridad. Solo los lazos que acompañan mi admiración podrán ser unidos por su escurridiza y antojadiza forma de escapar, pero que en cierta manera solo así podremos mantener en la opacidad nuestro inmanente vínculo de acercarnos uno al otro, sin saber siquiera de nuestras presencias, ni distancias.  
Logro en estos días poder referirme a usted, sin conocerla personalmente, solo a través de amigos que la han descrito muy atractiva, seductora y pasional. Ellos, que algunos la conocen muy de cerca, insisten en ponerles palabras a su descripción pero que a veces confunden aun mas mi ilusión de conocerla.
Las cualidades de las que ellos hablan han colmado mi persona de asombro, han eclipsado mis antojos, han endiosado mi quimera. Tanto es así que insisto todos los días a través de los mismos medios que ellos en lograr ese encuentro que parece convertirse repentinamente en una pretenciosa utopia.
Desde luego que de ocurrir en algún momento nuestro encuentro, tenga certeza será usted tratada y bienvenida de la forma mas especial posible. Sepa usted también que constituye una de las razones mas importantes de mis desvelos.     

Saluda atentamente, un fiel admirador 

villalonga mayo 2011

Suelto mi apuro (o ato)

Suelto mi apuro
y
rasgo,
la distante
y fina capa
de la ofuscación.
Rebelde
voy a prisa,
con
astucia esquivo
un alto
en el camino.
Solo espero
me juzgues
por acatar
mis instintos
no espero respuestas
ni caricias.
Espero
dediques
una mirada
que permita
enterrar
mis vísceras.
Nostalgias
he de abandonar
para resguardarme
u ocultarme
en algunas cómplices
sutilezas.

¿mear ansiedad?

antes de terminar de mear tiro la cadena corre el agua me ayuda a seguir meando sigo y veo el agua del inodoro sigue...